sábado, 9 de abril de 2011

La filantropía corporativa

La filantropía corporativa se basa en las contribuciones que provienen del sector empresarial, específicamente de las ganancias corporativas que se utilizan para apoyar al sector civil y sin fines de lucro. Estas donaciones pueden venir directamente de las compañías en si o de las fundaciones privadas establecidas y patrocinadas por ellas.
La responsabilidad social corporativa (RSC), también llamada responsabilidad social empresarial (RSE), puede definirse como la contribución activa y voluntaria al mejoramiento social, económico y ambiental por parte de las empresas, generalmente con el objetivo de mejorar su situación competitiva y valorativa y su valor añadido. El sistema de evaluación de desempeño conjunto de la organización en estas áreas es conocido como el triple resultado.
La responsabilidad social corporativa va más allá del cumplimiento de las leyes y las normas, dando por supuesto su respeto y su estricto cumplimiento. En este sentido, la legislación laboral y las normativas relacionadas con el medio ambiente son el punto de partida con la responsabilidad ambiental. El cumplimiento de estas normativas básicas no se corresponde con la Responsabilidad Social, sino con las obligaciones que cualquier empresa debe cumplir simplemente por el hecho de realizar su actividad. Sería difícilmente comprensible que una empresa alegara actividades de RSE si no ha cumplido o no cumple con la legislación de referencia para su actividad.

viernes, 1 de abril de 2011

Plan de marketing

Plan de marketing
Es una parte fundamental del plan: no basta con tener una idea genial, una necesidad sin satisfacer, sino que además vamos a saber venderla. Por eso, antes habremos realizado un estudio de mercado para detectar:
                                            


Quién es mi público potencialA quién me dirijo, qué espectro de población, franja de edad, sexo, zonas geográficas…
Pasillo de precios
El que propone Dinwoodie variará en función de tres conceptos: si es un mismo producto que ya está en el mercado, pero que va a cubrir necesidades nuevas que hemos detectado, el precio será más bajo porque es más fácil de imitar. Si es un producto diferente que va a cubrir necesidades que ya cubren otros productos, pero de otra forma, el precio también será bajo, por la misma razón. Si es un producto diferente que va a cubrir otras necesidades que hemos detectado, entonces sí podremos poner un precio más elevado.
Quién es nuestra competencia
Aquí debemos incluir quién está haciendo algo similar a lo que queremos hacer y en qué se diferencia nuestra propuesta de lo que actualmente se ofrece, bien porque el público objetivo sea diferente, bien porque vamos a cambiar el canal de distribución, bien porque hemos detectado un hueco sin cubrir. “Un buen análisis de la competencia nos permite también conocer cuáles son nuestras debilidades”, insiste Escorne. Para explicar este análisis de competencia podemos recurrir al mapa de la experiencia del cliente propuesto por Dinwoodie en el recuadro.
Establecer el precio de venta
Es decir, aquel que nos deje un margen de beneficio. Para fijarlo, una vez que hemos determinado nuestra clientela, el pasillo de precios y el precio de nuestra competencia, tenemos que aplicar la fórmula: margen bruto unitario = precio de venta unitario – coste variable unitario. El coste variable no es igual si es una empresa comercial, una de servicios u otra industrial. En el primer caso, el coste variable es el mismo del producto más los gastos de aprovisionamiento. En el segundo, al haber un proceso de fabricación es necesario sumar al coste del producto el coste de la mano de obra en la elaboración. En el caso de una empresa de servicios, al ser más intangible también resulta difícil determinar el precio, pero en cualquier caso hay que contar con el de la mano de obra.
Previsión de ventas
Hay que tener en cuenta las temporadas altas y bajas del negocio. Lo mejor es hacer una previsión a la baja para no pecar de optimistas. Debe hacerse una previsión del primer año mensual y luego una previsión de tres a cinco años. Realízala en tablas y ten la precaución de volverlas a incluir en el plan financiero.
Cómo lo vamos a distribuir
Explicar los canales de venta que utilizarás.
Cómo lo vamos a contar
Tienes que explicar cómo vas a comunicarlo. Se puede estructurar de la siguiente manera:
  • Descripción detallada de la marca y del logotipo y definición de nuestra marca.
  • Política de promoción: ferias y congresos, programas de patrocinio, esponsorización...
  • Acciones de marketing directo y de telemarketing.
  • Publicidad en medios especializados y generalistas.
  • Relaciones públicas.
  • Red de ventas.
Realiza también una previsión mensual y otra trianual de los gastos en marketing. En el plan de empresa que encontrarás en nuestra web, puedes ver ejemplos de tablas

EMPRENDE ECOLOGICAMENTE

El mercado ecológico es todo un boom. Consolidado como el sector “verde”, cada día son más
los productos y servicios que atraen la atención de millones de usuarios y clientes en todo el mundo.Hoy, tener conciencia ecológica y pretensiones de  empresario no es visto como improductivo. De hecho, ahora constituye una combinación ideal para crear un emprendimiento exitoso.
Déjate guiar por estos consejos, y elabora un plan de negocios eficiente que te permita crear el emprendimiento verde que deseas:
                                            
1. Planificar Una  empresa sostenible requiere una planificación a largo plazo. Ésta debe incluir
el diseño, el uso de energía, recursos y mucho más. Asegúrate de tomar un  enfoque integral y sostenible en su planificación.

2. Invertir con inteligencia La inversión  inicial debe ser un medio para integrar –desde su inicio- los conceptos de  sostenibilidad a sus procesos de negocio.

3. Conocer a tus clientes  El mercado  ecológico es un mercado nuevo y en expansión. Es necesario apropiarse de las  características de este nuevo "consumidor ecológico", para orientar  adecuadamente el marketing de tu empresa.
                                             
4. Seleccionar proveedores “verdes” Si para el desarrollo de tu emprendimiento debes comprar insumos a otras empresas,  asegúrate de que éstas compartan tu misma visión y compromiso con el medio
ambiente. Encárgate de exigir certificados que lo acrediten como tal.

5. Construir una imagen ecológica   Tus clientes deben ver que en tu empresa no sólo "venden" el estilo de vida verde,  sino que lo viven. Considera la posibilidad de llevar a cabo todas tus ventas en
los medios más eco-amigables. Evita la correspondencia en papel o el exceso de embalaje para tus productos.
                                                 
6. Buscar una ventaja  competitiva Muchas empresas compiten contigo en este mismo campo. Por lo tanto, debes crear una diferenciación de tu marca o producto mediante la  aplicación correcta de los conceptos de sostenibilidad.

7. Certificarte 
Para diferenciar tu  producto o servicio como eco-amigable, debes considerar la obtención de una
certificación verde internacional o propia de su país. Esta certificación te permitirá incluir tu "etiqueta ecológica" en la etiqueta del producto y otros materiales de marketing.